Hablaremos del masaje shiatsu: historia y procedencia comenzaremos por definirlo: es una forma de digitopuntura con una historia rica y fascinante. Originario de Japón, se basa en principios de la medicina tradicional china y ha ganado reconocimiento en todo el mundo por sus beneficios para la salud y el bienestar.
El término “shiatsu” se compone de dos palabras japonesas: “shi” que significa dedo, y “atsu” que significa presión. Esta técnica se desarrolló en el siglo XX por el maestro japonés Tokujiro Namikoshi, quien combinó sus conocimientos de anatomía occidental con las teorías de los meridianos de energía de la medicina tradicional china.
El masaje shiatsu se basa en la idea de que el cuerpo humano está compuesto por una red de canales de energía llamados meridianos, a través de los cuales fluye el “ki” o energía vital. Cuando el flujo de ki se bloquea o desequilibra, puede resultar en enfermedades y malestar físico y emocional. El objetivo del shiatsu es restablecer el equilibrio energético y promover la salud y la vitalidad.
Durante una sesión de Shiatsu el masajista aplica presión con los dedos, las palmas de las manos, en puntos específicos a lo largo de los meridianos del cuerpo adecuando la presión según la zona lo demande. También se pueden utilizar técnicas de estiramiento, movilización y manipulación suave para liberar tensiones y mejorar la circulación de energía.
El masaje shiatsu se ha utilizado tradicionalmente para aliviar el estrés, reducir la tensión muscular, mejorar la circulación sanguínea y promover la relajación profunda. Además, se ha informado que tiene beneficios para aliviar el dolor, fortalecer el sistema inmunológico y equilibrar las emociones.
Hoy en día, el masaje shiatsu se practica en todo el mundo y se ha integrado en muchas culturas como una terapia complementaria para promover el bienestar general.
Si estás buscando una forma de relajarte, aliviar el estrés o mejorar tu bienestar general, el masaje shiatsu puede ser una opción excelente.
